- Antes de encender la cámara, ten claro qué mensaje quieres transmitir. Esto implica responder a la pregunta: ¿Qué quiero que mi audiencia aprenda, sienta o haga después de ver este video?
- Sintetiza tu idea principal en una frase breve que guíe todo el contenido. Por ejemplo: “En este video, aprenderás cómo superar el miedo a la cámara y transmitir confianza.”
- Enfócate en un solo tema por video para evitar confundir a tu audiencia.
- Usa un lenguaje sencillo y directo, evitando tecnicismos innecesarios que puedan alejar o confundir a las personas.
Tip de storytelling: Plantea el problema al inicio del video para captar la atención de tu audiencia: “¿Te ha pasado que quieres grabar un video, pero el miedo te detiene? Hoy descubrirás cómo dejar eso atrás.” Este enfoque conecta emocionalmente desde el primer segundo.
Inspiración de Ogilvy: “Los titulares determinan si las personas leen o no tu mensaje.” Aplica esta idea a tus primeros segundos de video: capta la atención con claridad y relevancia.